Ucrania —
Una serie de ataques con drones rusos golpeó las ciudades ucranianas de Odesa y Járkiv durante la noche, dejando al menos una persona muerta y más de 20 civiles heridos, incluidas dos menores de 12 y 17 años, informaron este viernes las autoridades ucranianas.
Según el presidente Volodímir Zelenski, el ataque con más de 20 drones forma parte de una continua campaña de “terror selectivo contra nuestra población”, y pidió a Estados Unidos y la Unión Europea aumentar la presión económica sobre Rusia.
Los ataques provocaron incendios graves. En Odesa, un edificio residencial de cuatro pisos se derrumbó parcialmente y tres rescatistas resultaron heridos. En otro incidente, un rascacielos de 23 plantas fue evacuado tras ser alcanzado por el fuego. En Járkiv, al menos ocho drones impactaron en infraestructura civil, dejando cuatro heridos, incluidos dos niños.
Las Fuerzas Aéreas de Ucrania informaron que Rusia lanzó 80 drones Shahed y señuelos, de los cuales 70 fueron derribados o bloqueados electrónicamente.
Mientras tanto, el Kremlin anunció que espera fijar la fecha de una nueva ronda de negociaciones de paz la próxima semana. No obstante, Kyiv no ha mencionado recientemente intenciones de retomar las conversaciones, cuya última sesión se celebró en Estambul el pasado 2 de junio.
Pese a ello, Ucrania continúa promoviendo esfuerzos diplomáticos liderados por Estados Unidos para lograr un alto el fuego. Este viernes, ambas naciones confirmaron un nuevo intercambio de prisioneros, aunque sin detallar cifras. Zelenski destacó que muchos de los liberados llevaban más de dos años en cautiverio.
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