Tesla reportó ganancias netas de 409 millones de dólares entre enero y marzo, muy por debajo de los 1.400 millones registrados en el mismo periodo del año anterior. En su informe, la empresa aludió a factores como la incertidumbre en los mercados automotriz y energético, así como el "cambio de sentimiento político" como causas del descenso. Las ventas disminuyeron un 9 % interanual, mientras que las entregas de vehículos cayeron un 13 %, registrando el peor trimestre desde 2022.
La asociación de Musk con el gobierno de Trump, particularmente su rol en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), ha generado rechazo en sectores clave del mercado, especialmente en California, tradicional bastión progresista donde Tesla ha sufrido boicots, protestas y actos de vandalismo. Asimismo, su apoyo a figuras políticas de extrema derecha en Europa ha perjudicado la percepción de la marca a nivel internacional.
Las acciones de Tesla han perdido más del 40 % de su valor desde los máximos alcanzados a inicios de año, en un contexto agravado por la guerra comercial impulsada por la administración Trump. A esto se suma la creciente presión competitiva por parte de fabricantes chinos como BYD, Xpeng y Nio, así como las nuevas propuestas eléctricas de Volkswagen y Hyundai.
En una llamada con analistas de Wall Street, Musk confirmó que, a partir de mayo, reducirá drásticamente su tiempo dedicado al DOGE, limitándose a uno o dos días por semana “mientras el presidente lo considere útil”. A pesar de las críticas, defendió su papel en la reorganización del gobierno federal como “crucial”.
Tesla, que enfrenta también el aumento de aranceles a componentes importados desde China, se ha visto forzada a suspender pedidos de ciertos modelos en el país asiático y advierte sobre el impacto en sus márgenes de beneficio. La división energética también se verá afectada.
Frente a este escenario, la compañía apuesta por la innovación. Musk reafirmó el compromiso con el desarrollo de vehículos autónomos, anunciando el lanzamiento de un servicio de robotaxis en Austin (Texas) y próximamente en California. Además, Tesla planea introducir un nuevo modelo más económico durante el año, aunque aún no ha revelado el prototipo.
Debido al panorama económico incierto y los desafíos logísticos globales, la empresa no ofreció previsiones de ventas o beneficios para el resto del año.
0 Comments